POR:
Rhode Rivera,
Josue de la Cruz, Rogelio Gallardo.
Profesionales
asociados en producción de espectáculos.
Universidad del
Claustro de Sor Juana, junio 2014.
En el
documento Carta de la Transdisciplinariedad, elaborado durante el Primer
Congreso Mundial sobre Transdisciplinariedad en Convento de Arrábida,
Portugal, el 6 de noviembre de 1994, se redactaron 15 artículos que
establecen los principios fundamentales de la comunidad transdisciplinaria. Es
a partir de este documento en que nos reunimos tres profesionales de las artes
escénicas para, desde nuestra perspectiva como agentes culturales
establecidos en la Ciudad de México, resumimos e imprimimos nuestro punto de vista a estos principios
fundamentales.
Para
cualquier ejercicio o proyecto transdisciplinar, podemos englobar o establecer
lineamientos generales que apliquen a los partícipes de
dicho fenómeno:
Los artículos redactados en el
mencionado Congreso mundial, establecen de manera más específica preceptos que
se desenvuelven fuera de estas tres vertientes, sin embargo consideramos que de
estas tres vertientes se pueden establecer los demás artículos como puntos que
inminentemente brotan en el ejercicio transdisciplinario, si es que se
establecen las bases antes mencionadas. Entre los artículos establecidos en la Carta
de la Transdisciplinariedad podemos destacar lo referente a la “no
reducción y establecimiento de estructuras formales de conceptos humanos”, la
tolerancia, el rigor y la economía al servicio del ser humano.
En el ámbito de las artes
escénicas, es imprescindible la formalidad en las estructuras educativas por
parte del Estado y de la iniciativa privada en disciplinas como teatro, danza,
música y ópera. Si tomamos en cuenta que cada disciplina tiene sus vertientes
más especializadas, se obtiene uno de los enemigos más peligrosos para el ejercicio
transdisciplinar: la hiper-especialización. Es entonces impensable que un
especialista en música barroca pueda establecer un ambiente de diálogo y
participación con una bailarina contemporánea o un video artista y qué decir de
profesionales fuera del ambiente artístico. Es importante recalcar que la
producción de artes escénicas en nuestro país recae cada vez más en propuestas
“independientes” con el impulso y la presentación del estado a través de los
espacios escénicos y teatros dependientes del Instituto Nacional de Bellas
Artes, y específicamente de sus coordinaciones, las cuales se encuentran
divididas por “disciplina”.
Más allá de aportar un artículo
16 a los ya establecidos en la Carta de la Transdisciplinariedad, abrimos
el diálogo y la convocatoria para filtrar especialistas conscientes de estos
preceptos y su aplicación en políticas públicas que tengan la capacidad de
permear y modificar las estructuras educativas e institucionales culturales.
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